
El camino hacia el éxito de un emprendedor es un camino plagado de desafíos, subidas, bajadas y obstáculos a superar… y por si no fuera suficientemente difícil, hay un enemigo adicional con el que también tendrás que luchar: tu propio cerebro y cómo éste interpreta la realidad, poniendo trampas y distorsionando tu toma de decisiones. ¿Estas preparado?


Si, más descansar. No más lean startup, no trabajar más horas, no más esfuerzo ni nuevas herramientas. No trabajas ni en una cadena de montaje ni despachando pan en una panadería. Tus principales herramientas de trabajo son tu creatividad y tu capacidad para buscar nuevas soluciones… ¿y crees que estar cansado te ayuda en algo?