El mundo ha cambiado. Nuevos problemas. Nuevos retos. Nuevas condiciones. Sin embargo, seguimos gestionando nuestras empresas siguiendo básicamente los mismos principios que hace cien años… lo que a menudo nos conduce a situaciones absurdas. Es hora de que una nueva raza de líderes, con principios y formas diferentes tomen las riendas.
¿Realmente es un nuevo mundo?
Nadie nos preparó para el tremendo cambio que ha sufrido en los últimos años en el mundo de los negocios. Las enseñanzas que predican en las fábricas de directivos (con honrosas excepciones) están totalmente desfasadas, ya que fueron diseñadas para otro mundo… uno en el que era factible diseñar y seguir un plan estratégico a 5 años, un mundo donde lo que te habían enseñado en la escuela te serviría el resto de tu vida, y donde todo el mundo estaba dispuesto a ocupar su sitio en la bien engrasada y eficiente maquinaria de la empresa. Un mundo que ya no existe.
“Si los cambios afuera van más rápidos que los cambios adentro, el fin está cerca”. Jack Welsh
Los padres de ese mundo, gente como Henry Ford o Alfred Sloan nacieron hace 2 siglos, y creo que se revolverían en sus tumbas si vieran que sus doctrinas, absolutamente innovadoras y rompedoras para el momento en el que fueron concebidas, se siguen aplicando con mínimas variaciones en el siglo XXI… porque su celebridad nace de haber cuestionado el status quo imperante en su época, de atreverse a afirmar que existía una forma mejor de hacer las cosas que las prácticas establecidas.
El mundo en el que esos grandes gurús del management desarrollaron sus teorías desapareció hace tiempo… y sin embargo, muchas personas todavía no se han dado cuenta. En este nuevo mundo pasan cosas para las que no nos han enseñado a estar preparados:
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El mercado cambia a la velocidad de la luz, y si quieres seguir en la cresta debes cambiar a la misma velocidad.
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Los clientes rehúyen ser considerados un “segmento”, y reclaman su independencia y personalidad única.
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Los empleados no están dispuestos a ser considerados un tornillo, y quieren crecer y aportar valor.
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El conocimiento está en todas partes… pero sobre todo, está más allá de las fronteras de tu empresa.
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Los productos ya no tienen sólo que ser buenos. Tienes que ser extraordinarios. Y diferentes. Y adaptables.
En este nuevo ecosistema nos enfrentamos a un dilema absurdo con una única solución correcta: el cambio. Y sin embargo, seguimos empeñándonos en intentar moldear la realidad a nuestra forma de entenderla en lugar de adaptarnos, en esperar a ver si la tormenta amaina, a ver si acaba la crisis. Pues traigo malas noticias para algunos: esta es la nueva realidad, y el mundo nunca más volverá a ser igual. Como decía ayer Javier Cuervo:
Recuerda que muy poco de lo que te sirvió para sobrevivir al siglo veinte te será de ayuda en este convulso veintiuno
Pero para muchos otros es un mundo más divertido, con menos burocracia y donde lo que importa es lo que das y tu capacidad para adaptarte, y no tanto lo que sabes hacer ahora. Un mundo que necesita una nueva raza de líderes… pero:
¿Cómo educamos a nuestros líderes?
La base para responder a esa pregunta pasa primero por definir qué interpretación del término “líder” queremos hacer. En este caso, y no siendo nada formal, me refiero a las personas que deben dirigir una aventura empresarial, ya sea el fundador de una startup o un directivo de una empresa establecida.
Habitualmente éste tipo de perfiles aprenden qué es un líder por varios caminos diferentes (y sí, hay mil factores en el camino de su vida que matizarán su visión):
- IMITACIÓN: Todos a lo largo de nuestra carrera profesional identificamos ciertas figuras que nos han influido, tanto en lo bueno como en lo malo, y que van a matizar nuestra forma de entender el liderazgo, y sobre lo que importa y lo que no.
Curiosamente, y cuando uno se va haciendo mayor, descubre que además de esas influencias explícitas hay una serie de influencias tácitas que son igualmente poderosas, aunque menos visibles: cómo nos han educado en valores en nuestra casa, las figuras que admirábamos de pequeños…etc. Todas ellas han dejado su huella.
De igual forma, nuestra clase política desgraciadamente también forma parte de ese aprendizaje en valores y formas, y nos transmite qué es lo importante y qué no (largo plazo vs. pelotazos, esfuerzo vs. amiguismo…etc).
- ESCUELAS DE NEGOCIO: Son posiblemente y por definición la forja de líderes número uno, y en las que recae la mayor parte del peso del proceso. Además de la formación “técnica” (contabilidad, finanzas…etc) existe una serie de asignaturas clave, como la estrategia, los recursos humanos o el marketing que van a ser los cimientos sobre los que el futuro líder construya su visión y forma de trabajo.
Existen muchos tipos de escuelas, y mientras que algunas se esfuerzan por adaptar lo más rápido posible la formación a la realidad actual, muchas otras se dejan llevar y siguen enseñando los mismos principios que hace 30 años sobre cómo se resuelven los problemas, cómo se dirigen personas o se organizan equipos… lo que hace que se perpetúe el problema.
- LIBROS Y OTROS MEDIOS: Existen muchas personas que no se pueden permitirse una escuela de negocios, o que piensan que todavía no ha llegado el momento, y devoran libros y otros medios (revistas, blogs…etc) sobre liderazgo, negocios y management.
El problema es que muchos de ellos, al igual que los de las escuelas de negocios, fueron escritos hace más de 30 años… y claro, habitualmente uno se guía por los bestseller sobre determinados temas y no por los más adaptados a la realidad actual, lo que nos lleva a un ciclo vicioso donde los mejores libros no son los que más se venden, sino los más populares.
Yo creo que la clave para educar a nuevos líderes, más adecuados para la situación actual, pasa por actuar en varios frentes, pero estoy seguro que es una lista incompleta… así que me gustaría tener TU punto de vista. De los tres factores mencionados anteriormente yo creo que la clave sería incidir en:
- Familia y entorno: Todo empieza en nuestra casa. Los valores, la cultura del esfuerzo, el aprender a explorar… sin embargo muchas veces los padres educamos “a ciegas”, lo que lleva a cometer errores. Llevo algún tiempo investigando sobre el tema y pronto escribiré un post monográfico sobre esto.
Si embargo, la realidad actual es que educamos a nuestros hijos para que no asuman riesgos, para que intenten no sobresalir demasiado y para seguir la corriente… lo que es la antítesis del nuevo líder.
- Trabajo y referentes: En las empresas debemos empezar a gestionar de otra forma, a transmitir una visión de largo plazo, de tolerancia del fracaso, de flexibilidad, menos peso de la burocracia sobre la ejecución y de recompensa de la exploración y la innovación… ya que muchas de las actitudes de los futuros líderes las están aprendiendo en sus trabajos actuales.
- Escuelas de negocio: Sin duda creo que deben ser menos dogmáticas en general con lo que funcionaba hace 20 años, con casos de negocio de empresas de un tamaño que el 99% de sus alumnos no pisará jamás, y sobre todo, prepararlos para ser adaptables, imaginativos y ágiles, dándoles recursos para resolver nuevos problemas en lugar de simplemente aplicar formulas repetitivas.
- Libros, blogs: Existen ya decenas de libros y sitios que llevan pregonando este cambio y contando cómo adaptarse desde años. Sin embargo, los grandes medios tradicionales siguen empeñándose en empujar el mainstream, recomendando libros que realmente sólo servirán en la práctica a un pequeñísimo porcentaje de las personas que los leen.
Estas son algunas de mis ideas sobre cuales son los errores a la hora de forjar líderes, así como su impacto y problemas. Sin embargo, creo que lo más interesante será tener TU opinión.
¿CÓMO CREES QUE DEBEMOS FORJAR ESOS LÍDERES? ¿QUÉ REFERENTES NECESITAN?
El cambio está ahí, es cierto y con ella la incertidumbre. Lo más interesante de estos tiempos es que hemos pasado de un pensamiento ilustrado del siglo XVIII donde todo era como un reloj (Lagrange) al verdadero cambio que enseñaba Darwin. La teoría de la evolución nos enseña que todo es cambio y que uno debe adaptarse siendo imaginativo. Y para ser imaginativo unas claves sacadas de Las buenas ideas de Steven Johnson:
1. Lo posible adyacente: Mirar alrededor e innovar con pequeños pasos nuestra realidad.
2. Redes líquidas: La información no debe ser ni demasiado caótica como un gas, ni demasiado rígida como un sólido, sino debe fluir como el líquido.
3. La corazonada lenta: Pequeñas proto-ideas de diferentes disciplinas van surgiendo en tu interior y que uno debe apuntar en alguna libreta.
4. La serendipia: Celebrar el hallazgo feliz gracias a las redes líquidas y las corazonadas lentas.
5. El error: El error es fuente de inspiración. Benjamin Frankin decía: “Quizás la historia de los errores de la humanidad,…, resulta más valiosa e interesante que sus hallazgos. La verdad es uniforme y angosta…constante…Pero el error tiene una diversidad infinita”.
6. Exaptación: (De adaptación) Para innovar piensa en cosas que servían para una cosa y reutilizalas para otra totalmente distintas.
7.Plataformas: Comparte, coopera, crear ideas para que gente monte otras ideas sobre las tuyas. Newton decía que él se sustentaba en hombros de gigantes hablando de sus predecesores.
En definitiva, un mundo donde es hija de la teoría de la evolución, por fin. Un cambio que en tu blog marca con unas pautas creo que en la linea correcta, en la linea de evolucionar. Va a ser que los pokemons son fuente de inspiración ;).
Perdona si me he extendido demasiado. Un saludo y gracias por todo.
Me han parecido muy interesantes tus reflexiones, Gabriel… y no conocía las ideas de S.Johnson, me han gustado mucho! Seguiré investigando :)
Gracias por comentar!
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Creo que lo que más influye a la larga es cómo somos educados en nuestros primeros años. El factor “familia y entorno” que mencionas es el fundamental para mi, y ahí es donde los padres tenemos que tomar responsabilidades. Espero con ganas tu post al respecto.
Gran artículo, Javier, como siempre.
Me uno a esa “espera con ganas” del post sobre “educación de los peques”.
100% de acuerdo, aunque a partir de cierta edad creo que es responsabilidad de cada uno actualizarse pero no cabe duda de que la educación es fundamental.
Si, creo que si… por eso desde hace tiempo estoy estudiando y recopilando información sobre el papel de los padres.
Calculo Pachi, David y Mercedes que lo publicaré a principios de septiembre, así aprovecho el verano para darle forma :-)
Gracias pro vuestras opiniones!
En mi opinión, Javier, la humildad es la base de muchas aspectos que debe conformar un LIDER. Tengo una máxima que 1+1=2 Honestidad + Transparencia= CREDIBILIDAD. Pero este sumando se rompe cuando no existe ese principio que nos hace ser más nosotros mismos, sin caretas, más humanos, más íntegros. Por supuesto que ese entra desde la niñez con el factor familia y entorno. Pero se puede aprender, no lo dejemos todo en una excusa barata y egoista si no nos lo dieron.En mi opinión, los principios que hacen un líder se adquieren y es lógico que si se tiene una buena base familiar va a ser más fácil. ¿No os parece?
Buen punto Daniel! Al final todos nos intentamos COMPORTAR en lugar de SER…. me gusta el debate que sacas, y con el que estoy de acuerdo: se puede aprender a ser lider, aunque obviamente quien ha nacido así lo tiene mas fácil.
Pero mucha gente renuncia a su responsabilidad diciendo como excusa que no “nacieron” líderes…
No puedo estar mas de acuerdo, y gracias por la mención, Javier.
Es curioso que muchos dinosaurios opinen, e incluso exijan la forma en la que debe de tener lugar el cambio, o mas bien el no-cambio; al Cambio le da igual lo que los dinosaurios quieran porque el cambio es, y punto.
Se empeñan en bracear contra una ola, son fuertes y se creen mucho mas fuertes de lo que realmente son, se ponen de acuerdo pues el establishment está en juego, y luchan a brazo partido para evitar que la ola alcance la arena,… pero da igual.
Gracias a ti por generar tan buen contenido Javier! :-)
Completamente de acuerdo, la ola no la puede parar nadie… así que mejor montarte en la tabla de surf e ir encima que construir un rompeolas que proteja sus lujosos cuarteles, ya que aunque detendrá los primeros efectos, acabará siendo arrollado.
Muy buen post como siempre Javier. Apoyo tus ámbitos de acción, si bien me gustaria ampliar y matizar respecto de empresas. Como has hablado en algun otro post creo que es importante dejar las jerarquias actuales, y sobretodo dar voz a las nuevas generaciones.
Por mi parte considero fundamental la hibridacion intergeneracional de conocimiento, donde el “senior” y un “junior” se junten como iguales, con humildad y con ganas de aprender. La capacidad de mezclar la experiencia de unos con el empuje de otros marcara el guion del cambio en muchas empresas.
En una época tan complicada como la actual, seguimos en un modelo en el que prima “los años” y no lo que se puede y debe aportar, además de unirse al gran problema de tener una generación sobradamente preparada que se esta desesperando con la crisis actual.
Por ello, a los directivos de más de 40 les diria: pon un joven en tu vida. Y a los jóvenes, que espabilen de una vez, porque de ellos es el futuro, pero deben ganarselo a pulso.
Esta mes me he encontrado con un padre empresario,60,buen nivel,y su hijo ,34,el que todo lo sabe,han fichado a un gerente y el hijo quiere probarse como “mosquetero” con él,se pasan todo el dia discutiendo por el horario de Pepito o si el CRM es una mierda.Su hija 16 años ,les pregunta pero os habeis preguntado que quereis de vuestra empresa.Ahora entiendo la palabra de Saramago “ojiplatos” .Me encanta eso de hibridar Juan ,te recomiendo aunque ya tiene un tiempecito este video.Un abrazo de Jose Robles.
http://www.youtube.com/watch?v=SKT5RCIkIEc&feature=related
Gracias Juan! Estoy de acuerdo contigo como sabes… creo que la mente del aprendiz (https://javiermegias.com/blog/2009/07/destino-shoshin/), no contaminada por “los siempre se ha hecho así” es posiblemente una de las mejores fuentes de innovación de la empresa… así que sí, debemos escuchar más a los jovenes “locos” :-)
Me siento de acuerdo con los factores mencionados de cara a educar nuevos líderes. Querría mencionar al respecto un factor que me parece clave, y que no aparece identificado como factor unitario, aunque se supone incluido de forma transversal: este factor es el autoconocimiento y desarrollo personal.
El cambio sucede, seamos partícipes o no, a nuestro alrededor, y la importancia de nuestra capacidad de adaptación es indiscutible. Vivimos en el cambio, por lo tanto, debemos ser cambio. De la misma forma, seremos cambio, no tanto en la medida como QUERAMOS ser, sino en la medida en la que TRABAJEMOS serlo.
Podríamos entrar en la vieja discusión sobre si los líderes nacen o se hacen, creo que en esta ocasión, en la medida que hemos dado importancia a los factores ambientales (familia, formación, entorno…) este debate está superado. Las personas nacen, los líderes se hacen.
Así pues, YO agito la coctelera de los factores que ME influyen, en la medida que TRABAJE ser el dueño de mi realidad. La familia y el entorno, mi trabajo, mis profesores y los libros que leo, serán tan influyentes como mi permeabilidad y mi consciencia quiera, en la medida en que sea consciente que UNO MISMO ordena los factores de la ecuación.
Mi abuelo, de 91 años, ha cambiado poco, pese a todas las novedades que le rodean. Como dijo el otro: el cambio no existe, yo soy el cambio.
Muy buen punto Roberto, tienes toda la razón del mundo: el autoconocimiento cuando se une a lo voluntad es una de las fuerzas más poderosas… éste era precisamente mi objetivo, contar con vuestra sabiduría y enriquecer el concepto mucho más de lo que cualquiera de nosotros solos podríamos hacerlo…
GRACIAS!
Excelente artículo Javier,
Si me lo permites, una cita de Peter Senge en “La quinta disciplina”:
“Una organización inteligente, es aquella capaz de cuestionarse sus modelos organizacionales, donde su gente descubre continuamente como crear su realidad y como puede modificarla”
Abrazos
Pedro
Mil gracias Pedro! Es sin duda uno de los libros imprescindibles, y que me encanta!
Un abrazo
Menudo temazo el de hoy. Fantástico.
Lanzarse a hablar de algo así no tiene que ser fácil por el temor a parecer un “gurú”, pero como siempre das buenas claves para que sean los lectores los que las desarrollemos. Muy listo ! :-)
Una pregunta, ¿te mojarías a citar las Escuelas de Negocios que crees que lo están haciendo bien en este tema?.
Gracias, pero creo que soy cualquier cosa menos un gurú, más bien un eterno aprendiz que le gusta contar lo que va aprendiendo en su vida y trabajo :-p
No, no las mencionaría porque para cada tipo de persona y programa son diferentes. Lo mejor es que hables con egresados y les lances preguntas complicadas: si les han enseñado a resolver lo verás enseguida. De todas formas, la proxima vez que nos veamos si quieres te doy mi punto de vista… ya que hay de todo, desde alguna grande y conocida que está replanteándose estupendamente su papel a algún nuevo player que está haciendo las cosas genial…
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Si quieres cosechar fresas, no siembres patatas. Lo que se siembra en la escuela, desde los tres años, son patatas, y después queremos cultivar fresas. Nuestros niños acuden a un lugar durante años y años donde su función básica es obedecer al que sabe, reponder a sus preguntas, no hacerse las suyas propias, aprender a resolver los problemas que le dicen que hay que resolver de la manera que le dicen que hay que resolverlos, hacer lo mismo que todos cuando lo hacen todos, seguir un horario estricto en el que no tienen ninguna capacidad de influir, depender del elogio y la evaluación externa, no de la propia motivación… Y acabado ese periodo nos sorprende que tan pocos jóvenes tengan capacidad de decidir lo que quieren, de tomar sus decisiones, de actuar de otra manera, de emprender en lugar de esperar que le digan qué tiene que hacer en un trabajo que no le gusta, de liderar…. A mi lo que me sorprende es que aun con todo eso haya excepciones a la regla :(.
Este cuento y canción lo expresan muy bien http://wohom.net/post/la-flor-roja-con-el-tallo-verde/
Lo que hacen muchos libros, coach y escuelas es intentar arreglar lo que hemos roto cuando lo teníamos que haber cuidado. Creo que la clave no está en que cambie la forma de arreglarlo, sino en cuidarlo para no romperlo, educando de una forma redicalmente diferente a nuestros niños.
Buena reflexión Jaume! Me ha encantado tu post, es absolutamente real… Con tu permiso la enlazaré en el futuro. Ya sabes lo que se dice:
“Un adulto creativo es un niño que ha sobrevivido”
Mil gracias por comentar!
el tema radica fundamentalmente en que en la educación tradicional estamos enfocados en la “sumisión”,entendida esta en el sentido de que nuestro objetivo es no destacar demasiado para no contravenir las normas,eso si teniendo más formación académica que los demás(titulo),de esta manera a nuestros padres les ha ido bien.
Que ocurre ahora ?? pues como en todo todo depende de la oferta ya la demanda,mi padre fue ingeniero y antes solamente con eso ya tenias trabajo para toda la vida aunque no aportaras más que eso a la sociedad,Ahora mismo eso ya no vale ,ya que la formación se ha socializado y extendido a toda la la sociedad,es decir que hay ingenieros y titulados más de los que puede absorver el modelo económico….Entonces a quien le irá bien en el futuro?
Al que aporte algo diferente y pueda ofrecer un capital humano imprescindible e único,es decir que su aportación sea dificilmente imitable,siendo esta aportada mediante una formación base y sobre todo por un capital humano diferente..
Si os fijais los grandes gurús económicos de este siglo(bill gates,steve jobs,zuckenberg,richard branson..)se enfocaron en una formación orientada al resultado pragmático ,orientada a aportar algo diferente de lo que existia,la mayoría no acabaron su formación académica tradicional,pero si su formación orientada a su modelo de negocio..
Con esto no quiero decir que no se acabe la formación académica,pero si que no vale solo con eso ,si no que tenemos que hacernos “imprescindibles”
Desgraciadamente, y por lo que estoy comprobando en vuestros comentarios, estamos de acuerdo: la escuela y la familia.
Ahora en un mercado donde las titulaciones se han comoditizado, cada persona tenemos que aportar más, y sobre todo diferente. Ya sabeis que una de mis frases favoritas son:
“No te preocupes por ser mejor, esfuerzate en ser diferente”
Creo que el mercado del trabajo aún va a cambiar mucho más en los próximos años, y la relación de las empresas con sus trabajadores… así que mejor que por nosotros mismos seamos capaces de crear valor, no?
Gracias por comentar Javier!
Genial post Javier!!!El liderazgo toca y afecta las más variadas actividades del hombre en sociedad. Comenzando por la familia que es en primera instancia donde el padre y la madre deben ejercer un liderazgo responsable en sus hijos.
Este proceso de asumir responsabilidades como el de formar un hogar y desarrollar un proyecto de vida en familia se expande luego a la creación de núcleos sociales que actúan como polos de desarrollo y a la creación de empresas y grandes proyectos sociales y económicos que benefician a las comunidades, ciudades y países en el mundo.La educación académica tradicional por otra parte debiera ser una de las generadoras más importante del liderazgo, sin embargo no lo es, porque sus procesos y procedimientos generan más seguidores de modelos que líderes en los actuales estudiantes y profesionales.
Gracias! Si, se ha argumentado mucho que la sociedad es una evolución (muuuy adulterada) del proceso de creación de una familia. Desgraciadamente si nos enseñan sólo a memorizar y aplicar recetas preestablecidas y no a pensar, mal vamos…
Me has dejado sin palabras Javi,lo suscribo todo,solo un matiz en el tema de las escuelas de negocio te cuento mi experiencia en EAE,la improvisacion era tal que ni siquiera el directivo sabia que era el mangament ó la estrategia ,el iba buscando soluciones sin ni siquera identificar los problemas.Tiraba su dinero ,al final no acababa haciendo el master de finanzas ni el contable y eso que ya lo habia pagado.Bueno lo dicho GENIAL el post.
Gracias! :-)
Excelente artículo, buenísimo me quito el sombrero! (Que no llevo, pero vamos, hacía tiempo que no leía algo tan bueno… creo que algo de Juan Macías, hace bastantes meses)
Muchas gracias Neku! Juan es un genial escritor, sin duda!! :-)
Al líder se le tiene que comprometer más allá de su propio beneficio. Más allá del reconocimiento se le debe “dar” responsabilidad y compromiso. Qué entiendan los que están en condición o posición de mando, el gran compromiso de dirigir. De transmitir de guiar y/o enseñar. Son privilegios que se deben soportar con calidad moral y ética. Líder mediante el ejemplo. El reconocimiento llega solo. Si haces tu trabajo bien.
Has tocado un punto importante: yo creo en el liderar con ejemplo, en la importancia de guiar y no adoctrinar… el reconocimiento es el poso de un trabajo bien hecho, y sólo eso…
Gracias por una píldora más de reflexión y estímulo, Javier. Como siempre, genial.
Bajo mi modesta opinión, destacaría dos puntos fundamentales para llegar a ser líder. El principal, sentir pasión (ilusión). Saber qué es aquello que realmente apasiona y fijar un objetivo. Cuando consigues hacer de tu pasión, tu profesión, la dosis de energía está asegurada, la ilusión y las ganas (fundamentales para vencer obstáculos, perseverar y ser constantes).
Y el segundo, la pérdida del miedo, la importancia de mantener una actitud inconformista y tener confianza (en aquello que crees y que amas). Dejar de temer el fracaso, y de verlo como algo sumamente negativo. Convertirlo en su lugar, en una experiencia fundamental para alcanzar el camino indicado, y triunfar.
Luego tener un objetivo claro (algo que realmente te apasione) y perder el miedo a la acción. Solo caminando se construye el camino y, siempre, siempre, se gana. No importa cual sea el objetivo, lo importante es concentrarse en cada paso (y centrar esfuerzos en superarlo).
Por tanto, para mí lo fundamental para formar un nuevo lider es promover esa ACTITUD y valorar (desarrollar) el TALENTO de las personas -a todos los niveles, familia, colegio, escuela… (La verdadera identidad de las mejores marcas –marcas amadas y líderes- reside en el talento –no conocimiento- de las personas que están detrás).
Y promover una sociedad en la que ser bueno en música sea tan importante como serlo en matemáticas, y en la que el fracaso, sea considerado como un nuevo y gran paso del éxito.
Gracias!
Gracias por el comentario Eva Maria! La pasión es el combustible que nos mantiene en todo momento, bueno y malo.. y sin duda es clave! El miedo para mi es bueno. Lo que es malo es dejar que nos venza :-p
Me encanta tu ultima reflexion, con la que estoy de acuerdo completamente y tiene que ver mucho con el fracaso del sistema actual educativo. Ya lo decía Einstein:
“Si juzgas a un pez por su habilidad para trepar a los arboles, pasará toda su vida sintiendo que es estupido”
Me ha encantado tu escrito, Javier.
Quizá lo que más me haya servido ha sido un entorno estimulante que me hizo concebir el error como algo natural y positivo. Desde pequeña, y siguen haciéndolo, me han chinchado siempre para actúe según mi conciencia sin más límite que unos firmes principios. Desde ese margen, tengo libertad absoluta para hacer y deshacer.
Por supuesto, me equivocaré muchas veces -me han dicho siempre-, pero sólo tendré los brazos abiertos y la ayuda que necesite cuando me haya arriesgado e implicado.
Dicen que tengo capacidad de liderazgo.
Pues has tenido una suerte de la que no gozan muchas personas, ya que crecen en entornos donde se estigmatiza el error y el arriesgarse a tomar sus propias decisiones.
No es una garantía de un éxito, pero sin duda es un requisito!
Gracias por comentar! :-)
Como siempre, me ha encantado tu post y no le van a la zaga los comentarios.
A mi personalmente, me parece que de todos los elementos identificados, el fundamental, o al menos origen de todos los demás, es la educación.
¿Existe una educación en el cambio? Absolutamente convencido. Desde la edad más temprana, a base de repeticiones que pueden parecer tontas, pero que crean el hábito en el niño. Más adelante, una vez que se adquiere el hábito hay que llevarlo al terreno de los distintos ámbitos para transformar culturas, por ejemplo, “la cultura del trabajofijismo”.
¿Los artífices de esta educación? Los primeros, desde luego, la familia ¿qué les contamos a nuestros hijos qué es el trabajo? Luego la escuela ¿habéis mirado qué cuentan los libros de vuestros hijos sobre el trabajo y las empresas?
Estamos por lo que veo todos absolutamente de acuerdo con la importancia de la educación, y el papel clave de los padres en éste sentido…. me has hecho pensar, y sin duda voy a mirar qué dicen los libros que estudian nuestros hijos sobre las empresas
Buen punto!!
Francamente inspirador. Adaptémonos al cambio y no tratemos (porque es imposible) de que el cambio se adapte a nosotros.
Gracias Javier! Creo que es la base :-)
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